Escándalo por suero contaminado en Perú: ya son siete las víctimas mortales

Alejandra Lander murió el 18 de abril por el suero contaminado| Cortesía

El caso del suero contaminado fabricado por la farmacéutica Medifarma en Perú ha provocado una creciente alarma, con el fallecimiento confirmado de siete personas, después de que se registraran múltiples casos de reacciones adversas a este producto. La víctima más reciente es una mujer de 26 años, quien falleció el 18 de abril tras haber permanecido en estado crítico desde mediados de marzo.

La nueva víctima es Alejandra Lander, quien ingresó a la clíncia Sanna del distrito limeño de San Borjas el 18 de marzo con gripe cuando le colocaron el suero con alta concentración de sodio. La joven estuvo un mes con muerte cerebral a causa de la solución.

El suero, que fue distribuido a clínicas privadas en lugar de hospitales públicos, contenía una concentración excesiva de sodio, lo que provocó daños graves en los pacientes. La joven que falleció esta semana había sido tratada con este suero en una clínica privada de Lima, donde su condición empeoró rápidamente tras recibirlo.

Los primeros reportes de reacciones adversas comenzaron a finales de febrero, cuando se comenzaron a registrar las primeras muertes asociadas a este suero, afectando principalmente a pacientes que recibieron el lote contaminado. En marzo, la situación empeoró y varias personas fueron hospitalizadas con síntomas graves, como convulsiones y dificultad respiratoria, lo que generó la alerta de las autoridades sanitarias.

El Ministerio de Salud de Perú ha señalado que el producto afectado no fue distribuido a los hospitales públicos del país, sino que fue utilizado exclusivamente en clínicas privadas. A raíz de estos eventos, se suspendió la venta del lote implicado y se han abierto investigaciones para determinar las responsabilidades dentro de la empresa Medifarma.

Unas 4000 dosis del suero siguen sin ser identificadas.

Una de las principales críticas al manejo de la crisis es que la alerta sanitaria llegó demasiado tarde. Aunque el problema fue identificado a finales de marzo, la Dirección General de Medicamentos (Digemid) no emitió la alerta oficial hasta el 24 de marzo, después de que varias personas ya habían sido afectadas. Esta demora en la acción permitió que el suero contaminado continuara siendo administrado en las clínicas privadas durante varios días más, lo que agravó la situación y contribuyó al aumento del número de víctimas.

Con cada nueva víctima, la presión sobre las autoridades aumenta. Los familiares de los afectados y la sociedad en general piden explicaciones claras sobre las fallas en el control sanitario y exigen medidas para evitar que más personas sigan muriendo a causa de esta tragedia.

América 24Horas

sábado abril 19, 2025