El presidente de Panamá y el Secretario de Defensa de EE.UU.|Cortesía
Estados Unidos y Panamá firmaron un acuerdo que permite el despliegue de fuerzas estadounidenses en las zonas de acceso al canal y áreas adyacentes a la vía interoceánica.
Los dos países firmaron el acuerdo durante la visita del secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, a Panamá. Según el acuerdo, el ejército estadounidense y las empresas militares privadas que trabajan con Estados Unidos podrán utilizar sitios, instalaciones y áreas autorizadas y designadas para entrenamiento y actividades humanitarias.
Panamá permitirá el despliegue de fuerzas estadounidenses en zonas de acceso a su canal y adyacentes a la vía interoceánica, según un acuerdo bilateral publicado por el gobierno panameño. Sin embargo, el acuerdo excluye la posibilidad de que haya bases militares estadounidenses en su territorio.
Esta medida llega después de una intensa presión de la administración Trump para frenar la creciente influencia china en Panamá, un lugar estratégico, y proteger la seguridad nacional de Estados Unidos. El canal asegura el paso de aproximadamente el 40 por ciento de los bienes comerciales que entran y salen de los Estados Unidos, y más de 100 buques de guerra estadounidenses transitan por el canal anualmente.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Hegseth, dijo que Estados Unidos está decidido a proteger el Canal de Panamá contra la influencia maligna de China, y dio la bienvenida a una mayor presencia militar allí junto a las fuerzas panameñas para ayudar a asegurar la soberanía del canal.
Ninguna fuerza estadounidense ha estado estacionada en Panamá durante 25 años, luego de que el control estadounidense del canal terminara en 1999.
Según medios estadounidenses , esta medida es vista como una importante concesión al presidente Donald Trump, quien ha amenazado con que Estados Unidos podría retomar el control del Canal de Panamá si Panamá no reduce las tarifas que impone a los barcos estadounidenses.
El acuerdo no permite a Estados Unidos construir bases militares permanentes, algo que la administración Trump había buscado pero que los funcionarios panameños rechazaron.
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Pete Hegseth, se refirió al memorando de entendimiento durante una conferencia de prensa conjunta el miércoles con Frank Abrego, ministro de Seguridad Pública de Panamá.
Hegseth dijo que el acuerdo «aumentaría el entrenamiento y los ejercicios conjuntos, las operaciones y la integración militar general» entre los dos países, y señaló también que Estados Unidos podría «revitalizar» las bases militares en Panamá para «asegurar la soberanía» sobre el canal.
Pero Abrego rechazó la idea de permitir bases militares permanentes de Estados Unidos, y el presidente panameño, José Raúl Molino, también rechazó la propuesta.
El control del canal fue transferido de Estados Unidos a Panamá en 1999, en virtud de un tratado firmado en 1977 bajo la presidencia de Jimmy Carter.
La administración Trump ha expresado reiteradamente su preocupación por el control de China de esta vital vía fluvial, mientras que tanto Panamá como Beijing han rechazado estas acusaciones.
Más del 40 por ciento del tráfico marítimo de Estados Unidos, valorado en aproximadamente 270.000 millones de dólares anuales, pasa por el Canal de Panamá, lo que representa más de dos tercios de los barcos que pasan diariamente por la segunda vía fluvial más transitada del mundo.
Con informes de Alhurra