El Ministro de Asuntos Exteriores de Francia, Jean-Noël Barrot. Captura de video
El ministro de Asuntos Exteriores francés, Jean-Noël Barrot, ha descrito el llamado “alto el fuego de Pascua” de Rusia como una maniobra de relaciones públicas destinada a influir en el presidente estadounidense Donald Trump, más que un esfuerzo genuino por reducir las hostilidades.
Sus declaraciones se produjeron durante una entrevista con FranceInfo el 22 de abril.
“El alto el fuego de Pascua fue una estrategia de marketing, un gesto táctico diseñado para calmar al presidente Trump”, dijo Barrot. Lo calificó además como “una ofensiva de seducción para evitar que el presidente Trump se impacientara y se enfadara”.
Si bien Barrot señaló numerosas violaciones de la tregua, reconoció una disminución temporal en el uso de drones y misiles de largo alcance durante el fin de semana de Pascua. Sus comentarios se produjeron tras una conversación telefónica con el ministro de Asuntos Exteriores de Ucrania, Dmytro Kuleba.
Ucrania había aceptado previamente una propuesta de alto el fuego de 30 días, respaldada por Estados Unidos, que abarcaba la infraestructura marítima, aérea y energética. Francia enfatizó que el plan se basaba en una iniciativa franco-británica previa y destacó la disposición de Ucrania a llegar a acuerdos.
Señaló además que si bien Ucrania aceptó un cese del fuego de 30 días propuesto por Estados Unidos (que abarca la infraestructura marítima, aérea y energética), Rusia rechazó la oferta y en su lugar emitió una lista de condiciones que retrasaron su implementación.
Barrot enfatizó que los pasos significativos hacia la paz deben venir de Moscú y que el impulso actual para las negociaciones debe dirigirse ahora directamente a Putin.
Al comentar sobre el contexto diplomático más amplio, Barrot afirmó que las conversaciones entre Ucrania y Rusia están en curso y se espera que continúen en Londres. Reconoció la disposición de Ucrania a llegar a un acuerdo, calificándolo de componente esencial para avanzar hacia un alto el fuego negociado.
El Kremlin había declarado oficialmente un alto el fuego desde las 18:00 horas del 19 de abril hasta la medianoche del 21 de abril.
Sin embargo, funcionarios ucranianos acusaron a las fuerzas rusas de violar los términos casi de inmediato, continuando los ataques a pesar de la orden pública de Putin. El presidente Volodímir Zelenski también informó sobre un aumento de la actividad militar rusa durante el alto el fuego.