Mahmud Ahmadinejad presenta su solicitud en Teherán el 1 de junio. Cortesía
El expresidente iraní Mahmud Ahmadinejad se ha unido a una lista cada vez mayor de candidatos abrumadoramente de línea dura en las elecciones presidenciales que se celebrarán a finales de este mes para sustituir al fallecido Ebrahim Raisi, que murió junto con el ministro de Asuntos Exteriores de Irán en un accidente de helicóptero cerca de la frontera con Azerbaiyán a mediados de mayo.
Ahmadinejad anunció su intención de postularse el 1 de junio, y los medios estatales informaron el 2 de junio que el viejo enemigo de los reformistas, de 67 años, se había registrado.
Su anuncio sigue a promesas similares de un ex comandante del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica (CGRI) que está bajo sanciones de Estados Unidos, Vahid Haghanian, el alcalde de Teherán, Alireza Zakani, y el ex presidente del parlamento de Irán, Ali Larijani.
A Ahmadinejad, Larijani y otros contendientes potencialmente competitivos se les prohibió competir contra Raisi en las elecciones presidenciales de 2021 por instituciones que habitualmente excluyen a los moderados y otros rivales de las elecciones estrechamente controladas de Irán.
La inscripción de candidatos para las elecciones del 28 de junio cierra el 3 de junio. El Consejo de Guardianes anunciará la lista final de candidatos el 11 de junio, una vez que haya completado sus procedimientos de investigación.
Antes de su muerte, el ex fiscal Raisi era ampliamente visto como un sucesor potencial del líder supremo Ayatollah Ali Khamenei, de 85 años, quien ostenta el máximo poder político y religioso bajo el sistema dominado por el clero de Irán.
Ahmadinejad cumplió dos mandatos entre 2005 y 2013, y su segundo mandato estuvo marcado por feroces protestas por su disputada reelección en 2009 y una brutal represión. Parecía cada vez más dispuesto a desafiar públicamente a Jamenei a medida que avanzaba su mandato presidencial.
Vahid Haghanian fue sancionado por Estados Unidos en 2019 por su papel en el «círculo íntimo de Jamenei responsable de promover la opresión interna y externa del régimen».
El Departamento del Tesoro de Estados Unidos dijo en un comunicado de prensa anunciando las sanciones que Haghanian había sido «referido como la mano derecha del líder supremo».
Mientras que Zakani, exalcalde de Teherán, fue aprobado para postularse en las últimas elecciones presidenciales de 2021, pero se retiró después de que algunos de sus rivales lo apodaron el «candidato encubierto» de Raisi. La exlegisladora Zohreh Elahian, designada por la Unión Europea para ser sancionada, se convirtió el 1 de junio en la primera mujer en postularse a la presidencia iraní.
El ex jefe negociador nuclear Saeed Jalili se convirtió el 30 de mayo en el primer peso político en registrar su candidatura.
Otros candidatos también han presentado su candidatura. Las elecciones de Irán están plagadas de una baja participación que ha empeorado en los últimos años, impulsada por descalificaciones y represión de la disidencia.
Los grupos de derechos humanos se han quejado de una represión intensificada contra las expresiones públicas de descontento desde que Raisi y el Ministro de Relaciones Exteriores Hossein Amir-Abdollahian y varios otros murieron en el accidente de helicóptero en una región montañosa del noroeste de Irán mientras regresaban de una visita oficial a Azerbaiyán.
Raisi había sido acusado de actuar como fiscal de un «comité de ejecución» que envió a la muerte a miles de presos políticos y opositores al régimen a finales de los años 1980.
RFE/RL