Imagen referencial
El soldado ruso Nikita Sidorov, que regresaba de la guerra en Ucrania, mató a su ex esposa en presencia de su hijo de tres año. El hecho ocurrió en Chelyabinsk, la novena ciudad más poblada de Rusia.
Antes de ser atacada, la mujer logró llamar a la policía y decir que el militar estaba intentando irrumpir en el apartamento, amenazando con matarla.
Según los vecinos, el escuadrón llegó a la dirección requerida entre 35 y 40 minutos después de que la víctima comenzara a pedir ayuda. Según sus propias palabras, la policía escuchó a Sidorov golpear a la mujer, pero no derribó la puerta hasta que llegó el Ministerio de Situaciones de Emergencia. Cuando finalmente se abrió la puerta, la ex esposa de Sidorov ya estaba muerta. El delincuente Nikita Sidorov fue detenido en el lugar. Posteriormente, el tribunal le impuso una medida preventiva en forma de arresto.
Se informa que el Ministerio del Interior inició una investigación contra los agentes de la policía que no lograron salvar a la mujer.
Los medios de comunicación publican regularmente informes sobre delitos graves, incluidos asesinatos y violaciones, cometidos por quienes regresan de la guerra en Ucrania. Ya se conocen cientos de casos de este tipo. La resonancia que causaron obligó al gobierno ruso a recomendar a los periodistas controlados que no hablaran de tales incidentes.
En la víspera, un tribunal de la región rusa de Trans-Baikal condenó a 14 años de prisión por asesinato a un ex prisionero que había regresado de la guerra y que había recibido el indulto por participar en las hostilidades. Cabe señalar que Tsyren-Dorzhi Tsyrenzhapov fue condenado anteriormente por el asesinato de un estudiante de 18 años, robo y entrada ilegal a una vivienda.
Con información de RFE/RL